Hablemos de los abortos. Físicamente todo el mundo sabe qué significa esta palabra y en qué consiste este proceso, pero ¿te has planteado nunca la gran impronta energética que hay detrás de esta experiencia y de qué comportan a nivel energético?
Físicamente hablamos de un aborto cuando se detiene la creación de una posible vida, cuando por alguna razón se interrumpe la gestación, pero este hecho también tiene una visión energética:
Energéticamente, todos somos cuerpos de luz o almas que existimos más allá de nuestro cuerpo físico y de esa vida que estamos viviendo, y en el caso de un aborto aparte de la pérdida física también hay un movimiento energético importante en el que el alma que había escogido ser fecundada, regresa a su punto de inicio.
Físicamente puede que sea un proceso espontáneo, no deseado o escogido. Cada experiencia de cada mujer es única y tiene un trasfondo diferente, lo que sí tienen igual es ese movimiento energético del que hablamos, el cual debería ser atendido y tratado para que energéticamente todo retorne a su sitio y la energía fluya de forma saludable.
Cuando se experimenta un aborto, en muchas ocasiones y por la forma de gestionar normalmente la situación, se produce un estancamiento energético que puede acabar comportando bloqueos en otros aspectos vitales. Tanto el proceso físico en sí como todas las emociones que puedan aflorar a lo largo del mismo, incluso después, generan en el cuerpo energético femenino y especialmente en el útero una impronta densa que es la que puede acabar cristalizando y manifestándose a través de otros problemas si no se atiende. Es esencial reconocer esta parte del proceso, aunque pueda parecer más abstracta, para cerrar y sanar a todos los niveles esta experiencia vivida.
En este proceso de sanación energética del que hablamos deben abordarse las tres partes esenciales del aborto: la física, la emocional y la energética. No se entiende una sin otra ya que las tres se ven afectadas y una influye en el bienestar de la otra.
Como hemos dicho, el proceso es diferente para cada mujer que lo esté experimentando, por lo que es en las propias sesiones cuando se va profundizando en el caso personal y se explica qué comporta la sanación energética de cada uno de los puntos que hemos mencionado.
Si éste no se trata, puede que el patrón del aborto se repita en otros aspectos de tu vida; que no seas capaz de crear a otros niveles como podrían ser proyectos personales, relaciones, hacer realidad las ilusiones y los sueños que viven en ti… entre otros.
También puede que tú personalmente no lo hayas vivido pero que la impronta energética del aborto de alguna antepasada tuya haya recaído en ti al no haber sido sanado y atendido en su momento, normalmente ocurre cuando es una situación que se oculta y se vive en secreto. Esto también podría explicar por qué por mucho esfuerzo y ganas no eres capaz de lograr cosas como las mencionadas en el párrafo anterior, o incluso podría explicar el por qué no se está dando el embarazo que deseas, o el por qué no quieres tener hijos si este hecho te despierta emociones como el miedo o el bloqueo.
Sea cual sea tu situación de las anteriores es momento de atender tu cuerpo energético y sanarlo de estas memorias y experiencias, observa cómo los cambios van siendo visibles a lo largo del proceso y todo se va colocando en su sitio desde el respeto, el amor y la comprensión.
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